EL GOBIERNO VS EL CAMPO

Cual superclásico entre dos equipos rivales y antagónicos pero que deben llevar la misma camiseta: la de Argentina, el Gobierno y el campo continúan con flechazos
mediáticos sin llegar al tan esperado acuerdo.
"Tengo aguante" para darle pelea al campo lanzó la presidenta Cristina Fernández, con la soberbia y la verborragia inadmisible que pone la firma a sus discursos. "Los ruralistas se volvieron ´locos´" continuó el Jefe de Gabinete Alberto Fernández, en sintonía con la escasez de diplomacia y la voluntad de diálogo sin agravios. Es que, en esta ocasión, con la Jefa de Estado compartió no sólo el tan trillado apellido, sino también el vocabulario de un hincha en lugar de un juicioso y serio funcionario público.
Es tan tangible como palmario que este Gobierno está "enfermo" y en vez de buscar la cura, intenta disimular los innegables y dolorosos "síntomas". La inflación, los maquillajes a los datos del INDEC (Instituto Nacional de Estadísticas y Censos), los sucesivos casos de corrupción, la pobreza, y la inseguridad, entre otros, son los fantasmas que nos aquejan, y que hasta el momento no han podido exorcisar de la realidad argentina.

MASIVO TRACTORAZO DE PRODUCTORES

Día: 3 del nuevo paro del campo. Lugar protagónico: Gualeguaychú, Entre Ríos.
Esta mañana centenares de ruralistas y vecinos, flameando banderas argentinas, se movilizaron en caravana con sus camionetas y tractores y pusieron de manifiesto su apoyo al campo. Lo hicieron en concordancia con quienes mantienen las asambleas y concentraciones pacíficas a la vera de las rutas en diversos puntos del país como en Santa Fe y Buenos Aires.
Al mediodía la costanera que suele acoger las comparsas del carnaval fue escenario del multitudinario acto encabezado por el presidente de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi como orador central, y el dirigente entrerriano, Alfredo De Angeli, quienes dijeron "basta al modelo autoritario" y reiteraron el pedido al gobierno de flexibilidad y "humildad" para abordar a un acuerdo.
Al menos por el momento los "cortes parciales" de los ruralistas y las protestas no afectarían el normal abastecimiento de los mercados, como ocurrió en el paro anterior que se extendió del 11 de marzo hasta el 2 de abril y que en repudio a la actitud oficial sacó a relucir a las calles el ruido incesante de las cacerolas.
Mientras tanto, Buzzi aclara que sigue latente la solicitud de "suspender la resolución 125" que implementa las retenciones móviles, y advirtió que si para el día 14 no se arriba a una negociación continuarán con las protestas.